domingo, 11 de noviembre de 2012

Quédate aquí, a mi lado.

He sido un iluso. Pensé que te habías marchado por mi culpa. Aunque podría ser. No lo niego.
Tu querías ser humana, nunca quisiste ser como yo, sin embargo, te convertiste, y sigues a mi lado.
No querías mentirosos, sin embargo, te mentí, y sigues a mi lado.
Tampoco querías tramposos, sin embargo, te robé la opción de escoger muchas veces, y sigues a mi lado.
Ahora que ya no estás, me siento solo, no sé qué hacer, ni como actuar.
No quiero perderte. Y menos asi. Pero tampoco tiraré la toalla. Y ahora que veo que no es tu culpa, ni tampoco la mía, voy a recuperarte. Cueste lo que cueste. Estaré a tu lado, aunque no me reconozca, no recuerdes quien soy. No te dejaré marchar. Porque, simplemente, te debo mucho.
Ahora mismo, lo único que tengo. Tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario